LA OPERACIÓN NÉCORA: EL CAMBIO DEL BIENESTAR GALLEGO

Galicia posee una tradición larga acerca del estraperlo, donde durante la Guerra Civil Española, el contrabando procedente de Portugal tuvo un gran auge. En la época de los sesenta, los estraperlistas centraron su actividad en el contrabando del “rubio o Winston de batea”, pasando de las rutas fronterizas con Portugal, a las descargas en alta mar, de las cajas de tabaco americano desde buques marcantes a planeadoras o pesqueros, para su desembarco en las costas gallegas.

En aquella época, Vicente Otero Pérez, alias “Terito”, era un reconocido empresario y patriarca de los contrabandistas de tabaco de la época y que tenía en su misma mesa a personajes como Los Charlines (comandados por Manuel Charlín), Laureano Oubiña, Marcial Dorado Baúlde y José Ramón Prado Bugallo, alias “Sito Miñanco”. Estos contrabandistas de tabaco consensuaban con Vicente Otero a la cabeza, los territorios y las condiciones de actuación de este ilícito, con la finalidad de evitar rivalidades entre ellos, operando cada clan de forma autónoma en su territorio. A principios de los ochenta, destacaban en el estraperlo de tabaco grupos como “ROS”, “Marcial” y el de “Sito Torrabo”. Era una época de cambio, donde la mayoría de los “hombres do fume” abandonaron esta actividad para dedicarse al contrabando del hachís y de heroína, o como la llamaban “fariña”. Cabezas como Vicente Otero se negaron a traficar con narcóticos, y el resto, como "Sito Miñanco" a la cabeza, al tráfico de fariña.

Pero los ochenta fueron tiempos difíciles para el narcotráfico gallego. En 1986 se creó la asociación “Érguete”, con Carmen Avendaño al frente, entidad conocida como “las madres contra la droga” que generaron una intensa protesta social que desencadenó una serie de operaciones policiales contra el narcotráfico en Galicia que culminaron con la “Operación Nécora” el 12 de junio de 1990 y la detención de los jefes del narcotráfico gallego del momento. Está operación sólo condenó a cárcel a Laureano Oubiña y su esposa y a Sito Miñanco, pero gracias a esta operación el mundo del narcotráfico en España dio un giro dramático que beneficiaría a la justicia.