LA PRIMERA HUELGA DE LA HISTORIA
Las huelgas han sido la herramienta por excelencia de los trabajadores para conseguir mejoras en su ámbito laboral durante siglos. Pero ¿son un invento moderno? No. Como casi todas las cosas de nuestro mundo actual, debemos buscar su origen en la antigüedad, especialmente en Egipto y Roma.
La primera huelga documentada de la que se tiene constancia, es en el
reinado del faraón Ramsés III hacia el año 1166 a.C. Durante la construcción de
la tumba de Ramsés III, los obreros, conviene recordar que no eran esclavos, se
negaron a continuar trabajando, asaltaron la necrópolis y redactaron una carta
con sus exigencias. Esta práctica se parece en especial al cartismo, movimiento
proletario del siglo XIX. En esta carta reclamaban la atención del Faraón y el
Visir, para que satisficiesen la carencia de ropa, comida, agua… Sin embargo,
esto fue un acto aislado, y para encontrar un uso más habitual de la huelga
debemos ir a la antigua Roma.
Cómo muchos sabréis, Roma era en sus orígenes una monarquía, sin embargo,
tras la mala gestión por parte de Tarquinio el Soberbio, y según las leyendas
un incidente con el honor de una mujer, fue derrocado, instituyéndose así la
República en el año 509a.C. Los primeros siglos estarán marcados por los
conflictos entre los patricios (descendientes de los fundadores de Roma,
portaban el nomen gentilicium que era como el apellido de hoy en día) y los
plebeyos (el resto de ciudadanos romanos).
Estas luchas patricio-plebeyas se centraron en varios ámbitos: poder acceder a magistraturas y colegios sacerdotales, derogación de la prohibición de los matrimonios entre patricios y plebeyos… Pero, ¿cómo podían hacer frente unos ciudadanos pobres contra otros, con más dinero y recursos y con el apoyo del ejército?
El arma que emplearon fue la secesión (secessio plebis). Los plebeyos
se retiraban en masas a los montes Sacro y Aventino, donde estaban situados los
templos y veneraban a sus dioses: Ceres, Liber y Líbera; deteniendo la
construcción, explotación del campo... La primera secesión de la que se tiene
registro data del año 494.C. Pero no será hasta el 286 a.C. cuando se considera
la equiparación de ambas clases aproximadamente.
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